Al principio de los tiempos, el hombre se ha preguntado el ¿por qué? de las cosas. Antaño, el hombre era un ser espiritual, un guerrero con un objetivo en mente.Desde pequeños se les iniciaba en temas de Espiritualidad y guerra, porque ellos sabían que habría una gran guerra, una gran guerra en la que la Espiritualidad sería lo que se jugaba.
Esta guerra en parte fue perdida, con el paso del tiempo y de las tecnologías, la gente fue avandonando su lado Espiritual, para centrarse en lo plenamente material.
Creo que una imagen vale más que mil palabras, y esto, desgraciadamente es la actualidad:
La comodidad, es un gran engaño, es una gran arma del enemigo, y cuando la sociedad se va acomodando, el despertar se hace cada vez más difícil, ¿creen sinceramente que este señor va a despertar?, yo creo que no.
Sean un guerrero espiritual, no se dejen manipular y desde luego no se deben rendir.
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